"Pido disculpas a mis compañeros y al club", afirmó hoy el astro argentino Lionel Messi, en alusión al viaje que realizó a Arabia Saudita y por el cual París Saint-Germain le aplicó una suspensión de 15 días a modo de sanción.
Los dirigentes sustentaron la medida disciplinaria aduciendo que el campeón mundial no había sido autorizado a viajar para cumplir con compromisos comerciales que ya había postergado en dos oportunidades.
"Necesitaba hacer este video por todo lo que está pasando y ante todo pedirle disculpas a mis compañeros y a club", explicó Messi en un posteo que subió a la red social Instagram para aclarar la situación.
El ganador de siete Balones de Oro confesó, sin embargo, que "pensaba, sinceramente, que teníamos un día libre después del partido, como en las semanas precedentes y había organizado el viaje, que esta vez no pude cancelar".
En realidad, tras la derrota del domingo frente a Lorient que no le impidió a PSG mantenerse como líder de la Ligue 1, el entrenador Christophe Galtier convocó al plantel para entrenarse al día siguiente y Messi no apareció.
Por ese motivo recibió la sanción que lo margina no sólo de las prácticas, sino de los partidos frente a Troyes, el domingo próximo, y frente al Ajaccio, el sábado de la siguiente semana, lapso en el cual no percibirá su remuneración.
A falta de cinco fechas para el cierre del campeonato y pese a haber sufrido tres derrotas en sus últimas cuatro presentaciones, el club parisino comanda las posiciones con 75 puntos y cinco de ventaja sobre el escolta Olympique de Marsella.
Enfundado en un conjunto deportivo de color gris, Messi dio su punto de vista sobre lo ocurrido y asumió la responsabilidad de sus actos al afirmar que ahora está a la espera "de lo que el club decida".
Luego de lo ocurrido, el argentino volvió a quedar en la mira de los aficionados del PSG, que suelen silbar su nombre cuando la voz del estadio Parque de los Príncipes anuncia la formación del equipo antes de los partidos y que esta vez lo insultaron con gruesos epítetos.
Pero no sólo Messi, quien no renovaría el vínculo con el club que caduca al final de esta temporada, es resistido por los fanáticos, pues el fastidio apunta también a su amigo y compañero brasileño Neymar, al mediocampista italiano Marco Verratti y al propio Galtier.
El entrenador confirmó que le informaron que Messi había sido sancionado, explicó que se limitará a acatar la decisión de los dirigentes, pero se excusó de opinar al respecto.
Los caminos del argentino y del PSG parecen separarse definitivamente en breve y eso alimenta las especulaciones sobre cuál será el próximo destino del astro, con cuya "repatriación" sueña Barcelona y a quien el saudita Al-Hilal le ofreció 400 millones de euros por un año de contrato para promocionar al fútbol de ese país, en el que milita su histórico "enemigo", el portugués Cristiano Ronaldo, jugador al Al-Nasrr.
TODOS LOS DERECHOS RESERVADOS © Copyright ANSA