La tradicional Milán-Turín, la competencia ciclística más antigua del mundo, está de regreso y celebrará su centésimo cuarta edición a partir del 15 de marzo.
El recorrido de la prueba, que fue presentado hoy en Turín, será todo en terreno plano y partirá desde Rho, ciudad ubicada en la provincia de Milán, para atravesar luego Magenta, Novara y Vercelli hasta arribar a Canavese, Caluso y Foglizzo para luego proseguir rumbo al norte de Turín, donde concluirá tras pasar por la zona del Parque dela Mandria, Val di Susa y los últimos diez kilómetros en Orbassano.
"La Milán-Turín es una clásica competencia deportiva sin tiempo", afirmó el asesor de Deportes de la región de Piemonte, Fabrizio Ricca, al destacar que la suya es "tierra de gran tradición en el ciclismo, tanto por parte de los atletas, como de los aficionados".
"Estar nuevamente en el centro de un gran evento deportivo de este tipo representa para nosotros un honor y una oportunidad", agregó Ricca.
Paolo Bellino, directivo de RCS Sports, destacó por su parte que el calendario de la competencia fue confirmado en 2022 "en su fecha original de marzo, entre la Tirreno-Adriático y la Milán-San Remo", otras dos pruebas ciclísticas tradicionales que alberga Italia.
"Nuestras Clásicas, además de atravesar la historia del ciclismo, cuentan la historia de Italia como pocos eventos saben hacerlo, además de crear importantes lazos como el que mantenemos con la región de Piemonte y que renovamos año tras año", agregó.
"Es un placer y un honor para nuestra ciudad acoger el tramo final de la Milán-Turín", comentó la alcaldesa de Orbassano, Cinzia Maria Bosso, al afirmar que "es una ocasión para no perderse esta posibilidad de albergar una competencia de tanto prestigio internacional y un evento deportivo del más alto nivel".
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