El fútbol croata está de luto por la muerte a los 87 años del DT Miroslav "Ciro" Blazevic, quien guió a la selección balcánica al tercer puesto en el Mundial de Francia 98, que marcó el debut absoluto del equipo en una Copa del Mundo.
    "La familia del fútbol ha perdido al 'entrenador de todos los entrenadores'", publicó en su cuenta de la red social Twitter la Federación Croata de Fútbol (HNS) en alusión a Blazevic y su apodo en los Balcanes.
    Blazevic, quien murió después de una larga batalla contra el cáncer que le fue diagnosticado en 2011, había sido recordado por el DT Zlatko Dalic luego que Croacia finalizara en el tercer puesto del Mundial de Qatar 2022.
    "Jefe, descanse en paz... Gracias por todo", escribió Dalic en su cuenta de Instagram en alusión a Blazevic, a quien evocó como el "hombre que lo empezó todo" luego que Croacia venciera a Marruecos en el duelo por el tercer puesto del Mundial ganado por Argentina en diciembre pasado.
    "Ésta es para ti, ésta es tu medalla. Aunque ganara cinco más, seguirías siendo el entrenador de entrenadores", completó Dalic su homenaje a Blazevic, nacido en Bosnia el 10 de febrero de 1935.
    Blazevic, que con 63 años llevó a Croacia a las semifinales del Mundial 98, en las que cayó con el anfitrión Francia (luego campeón al vencer a Brasil), se dio a conocer en ese torneo porque lució un kepi para rendir homenaje al policía Daniel Nivel, gravemente herido por hooligans germanos antes del partido de cuartos de final entre Alemania y la selección de los Balcanes.
    Croacia venció luego por 2-1 a Holanda para completar el podio de Francia 98, lo cual supuso una gran victoria para el jovencísimo país, independiente desde 1991, apenas tres años después de una guerra (1991-95) que había matado a unas 20.000 personas.
    Blazevic jugó en la desaparecida Yugoslavia y en Suiza, donde comenzó su carrera como entrenador en 1968, concretamente en Sion, equipo con el que ganó la Copa local seis años después.
    Sin embargo, su primera gran victoria, la más grande, arribó en 1982, cuando se coronó campeón de Yugoslavia con Dínamo Zagreb, con el que se consagró también en 1993 y 2003 antes de ser considerado "el creador del culto a la selección croata de fútbol".
    También dirigió equipos de Francia, Grecia, China, Irán, Eslovenia y Bosnia y Herzegovina, de cuya selección fue DT al igual que de la de Suiza, Irán y del combinado olímpico chino.
   
   

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