Macron informó que la famosa entrada a la Pirámide promovida por el expresidente François Mitterrand fue diseñada para 4 millones de visitantes, pero ahora se han convertido en 9 millones al año y, por lo tanto, es necesario un nuevo acceso.
Macron sostuvo que el objetivo es llegar a los 12 millones de visitantes para 2031.
El mandatario anunció entonces un concurso internacional para diseñar el nuevo proyecto, que debería estar terminado en 2031.
En ese marco, habló esta tarde en el Louvre para ilustrar sus propuestas contra la degradación del museo y calificó de "un privilegio" hablar bajo la "indescriptible" mirada de la Mona Lisa.
El objetivo del nuevo museo del Louvre, "repensado, restaurado y ampliado", es recibir 12 millones de visitantes anuales de aquí a 2031, frente a los 9 millones actuales, anunció Macron.
Entre otras cosas, evocó una diversificación de las tarifas, con un billete más caro para los visitantes "no europeos" a partir de 2026.
Los anuncios del mandatario francés responden a la alerta de la presidenta del museo más visitado del mundo, que se encuentra en estado de deterioro en muchas de sus estructuras, a menudo antiguas y anticuadas.
Laurence des Cars, dio la voz de alarma en una carta dirigida a la ministra de Cultura francesa, Rachida Dati, hablando de "multiplicación de averías y del estado muy degradado" de las estructuras y del equipamiento técnico en estado "preocupante", además de "variaciones de temperaturas que ponen en peligro el estado de conservación de las obras".
El informe de Des Cars, que debía permanecer confidencial, terminó publicado en la prensa. En el texto subrayaba que "La Gioconda merece una ubicación diferente".
Al conocerse la noticia, la región italiana de Lombardía se ofreció a llevar de regreso a Italia la obra de Da Vinci, declarándose preparada para acogerla.
La consejera de Cultura de la región, Francesca Caruso aclaró que "solo estamos disponibles para acoger las obras durante un periodo temporal".
Por cierto, no sería la primera vez que la "Mona Lisa" visita Milán. A pesar de los muchos estereotipos sobre el regreso de la pintura a "su" Italia, en el pasado "La Gioconda" fue en realidad robada y en 1913 se exhibió durante un día y medio en la Pinacoteca di Brera, atrayendo a muchos visitantes.
Milán, de hecho, ya acoge varias representaciones de Leonardo, sobre todo el "Cenacolo Vinciano", que representa la Última Cena de Jesús, pero también "el Retrato de un músico", "el Códice Atlántico" o las decoraciones de la Sala delle Asse del Castillo Sforza.
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