(ANSA) - MADRID 6 JUN - Una exposición en la Biblioteca
Nacional de España (BNE) presentada hoy, recrea la vida de los
intelectuales españoles exiliados en Puerto Rico.
La muestra reconstruye el amplio contexto del exilio
intelectual español a través de la actividad cultural de un
grupo de intelectuales, tomando como hilo conductor la historia
de amor y de trabajo intelectual de Juan Ramón Jiménez y Zenobia
Camprubí.
Junto a ellos transcurren por la exposición la vida y la
obra de escritores, compositores, profesores y artistas de
renombre como Pau Casals, María Zambrano, Francisco Ayala, Pedro
Salinas, Fernando de los Ríos o Aurora de Albornoz, que hicieron
de Puerto Rico su hogar y que participaron de forma intensa en
la vida sociocultural de la isla.
El exilio "permitió sobrevivir al ideal de la España culta y
democrática, una España admirada y querida que hizo de Puerto
Rico su patria cuando se quedó sin patria", dijo el presidente
de Acción Cultural Española, José Andrés Torres.
Por su parte, el secretario de Estado de Memoria
Democrática, Fernando Martínez López, subrayó que "todos los
exilios son dolorosos y más si son consecuencia de la defensa de
los valores democráticos. El valor del que aquí se habla es la
diáspora más importante que ha sucedido en España en la época
contemporánea".
La muestra "El exilio intelectual español en Puerto Rico",
que permanecerá abierta en la BNE hasta el 3 de septiembre, la
componen más de un centenar de piezas -de las que la mitad
pertenecen a la BNE- que trasladan al visitante al Puerto Rico
de mediados del siglo XX.
Junto con un gran número de manuscritos, fotografías y
objetos personales, la exposición cuenta con una dimensión
audiovisual.
Se trata de un juego de espejos, imágenes y reflejos que
permiten al público compartir la "experiencia del exilio" de
todos los que dejan atrás su tierra.
Entre las piezas expuestas en la muestra, comisariada por
Ernesto Estrella Cózar, destaca el retrato de Juan Ramón Jiménez
(1881-1958) pintado por Joaquín Sorolla en 1903, un cuadro que
se exhibe por primera vez en España.
Junto a él se encuentra el retrato de una Zenobia sonriente,
también pintado por Sorolla en 1918.
Ambos cuadros fueron cedidos para esta exposición por la
Universidad de Puerto Rico, que colabora en la muestra junto al
Gobierno de Puerto Rico. (ANSA).
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