(ANSA) - Roma, 24 de junio - El Movimiento 5-Estrellas (M5S) comenzó a reagruparse en estos días, tras una votación para expulsar a una Senadora por haber criticado al líder y fundador del bloque antisistema, Beppe Grillo.

La expulsión de Adele Gambaro, electa como senadora en el mes de febrero, "no fue una victoria" sino una necesidad, manifestó el representante del M5S en el Senado.

"No fue más que el reconocimiento de tener que corregir un error," le comentó Nicola Morra a la Radio Radicale italiana.

En una consulta online llevada a cabo este miércoles entre los 48.292 simpatizantes del partido, el 65,8% votó a favor de la expulsión de Gambaro, quien culpó a Grillo por el pobre desempeño del partido en las recientes elecciones locales realizadas en todo el país.

Grillo primero le había solicitado que diera un paso al costado pero ella se rehusó, con el apoyo de varios diputados de su partido. Roberto Fico, un importante diputado del M5S, dijo que no preveía ninguna otra expulsión.

"No vislumbro ninguna clase de problemas en el horizonte," declaró ante la emisora italiana Radio 24 cuando se le preguntó acerca de otras expulsiones.

El martes, otra legisladora del M5S, la diputada Paola Pinna, estuvo a punto de ser expulsada luego de que colegas de su partido la denunciaran por haber alegado que había un "clima de presunta delincuencia" en el movimiento que funciona a través de Internet.

El caso de Gambaro y de otros calificados como disidentes han señalado un momento de definición en el movimiento, que se enorgullece de su unidad casi monolítica la cual facilitó su lanzamiento en el mes de febrero, donde alcanzó un sorprendente éxito en las elecciones generales, cuando obtuvo aproximadamente el 25% del voto popular.

Sin embargo, a partir de entonces, el partido fracasó en las elecciones locales recientes, oportunidad en que el partido de centro-izquierda fue literalmente barrido en todas las capitales provinciales participantes, incluyendo a Roma, lo que dio lugar a los fatídicos comentarios de Gambaro sobre el líder de su partido.

Gambaro dijo que Grillo, cuya negativa a comprometerse con otros partidos permitió prolongar un estancamiento de dos meses en el parlamento a principios de este año, se había convertido en "un problema para el movimiento".

El caso puso al descubierto una serie de desavenencias internas en el partido, y hay quienes sospechan que es inminente una ruptura formal.

Mientras tanto, Gambaro está pensando en incorporarse al denominado "Grupo Mixto" de los independientes y de los partidos pequeños existentes en el parlamento.

"Yo creo que sí. Todavía no he pensado al respecto," declaró la Senadora ante la emisora italiana Radio Radicale.

"Después de la expulsión, así lo creo, tras haber visto lo ocurrido con el Senador Marino Mastrangeli, quien se incorporó al Grupo Mixto".

Mastrangeli fue expulsado del partido en el mes de abril por haber violado una prohibición que impedía la aparición pública en programas televisivos.

A pesar de su expulsión, Gambaro dijo que las relaciones seguían en buenos términos con "la mayoría de mis colegas, con casi todos".

"No hubo ningún problema de índole personal," agregó.