(ANSA) - Milán, 24 de junio - Este lunes un tribunal de Milán falló en contra de Silvio Berlusconi por los cargos del pago por sexo con una prostituta menor de edad y abuso de autoridad para intentar ocultar el asunto y dictó una sentencia a siete años de prisión para el ex primer ministro.

El tribunal asimismo dictó la inhabilitación vitalicia para ejercer cargos públicos en contra de Berlusconi.

Niccolo' Ghedini, uno de los abogados defensores de Berlusconi, sostuvo que el fallo "era ilógico" y manifestó que su cliente apelará. Ghedini remarcó que los jueces han "incluso sobrepasado" la sentencia de seis años que habían solicitado los fiscales.

Berlusconi y la mujer con la que se lo vincula en el juicio, que según los jueces recibió dinero a cambio de sexo antes de cumplir los 18 años, una exbailarina marroquí conocida como 'Ruby robacorazones', han negado haber mantenido relaciones sexuales. Sostienen que el dinero que recibió por parte de Berlusconi se trataba de un regalo para ayudarla a instalar su salón de belleza, un sueño que había tenido desde que se había escapado de un presunto padre abusador del Islam en Sicilia.

Los fiscales reverán la veracidad de dicho testimonio en una investigación por injurias solicitada por los jueces luego del fallo de este lunes. Ghedini, quien también se desempeña como legislador para el Partido del Pueblo de Libertad (PdL) de Berlusconi, declaró que el tres veces primer ministro debería haber sido absuelto del presunto delito que involucra a Ruby - cuyo nombre verdadero es Karima El Mahroug - porque "el caso no existe".

La condena por abuso de poder se relaciona con el llamado que realizó Berlusconi a una comisaría en la noche del 27 - 28 de mayo de 2010 luego de la detención de Ruby por una acusación de robo no relacionada.

Manifestó que llamó para evitar un incidente internacional porque creía que ella era pariente del presidente de Egipto de ese entonces, Hosni Mubarak.

Ghedini sostuvo que su cliente no le pidió a la policía que acelerara el procedimiento para la liberación de Ruby.

Pero los jueces estuvieron de acuerdo con los fiscales que alegaban que Berlusconi, que desempeñaba el cargo de primer ministro en el año 2010, había llamado por teléfono desde una reunión con líderes europeos en París y había presionado a la policía de Milán para que la liberara.

Debido a que la muchacha era menor de 18 años, un juez ordenó a la policía que la trasladaran a un hogar para delincuentes juveniles.

Ruby fue entregada en libertad a Nicole Minetti, una concejal regional de Lombardía, exvedette en ascenso y exhigienista dental de Berlusconi, que estaba acompañada por otra mujer que participaba de las fiestas.

Ruby había respaldado la versión de los hechos expuesta por Berlusconi y recientemente mostraba un pasaporte ante los medios que había sido manipulado para aparecer como si ella fuera miembro de la familia Mubarak.

En un juicio relacionado, Minetti y otras dos personas se encuentran acusadas de conseguir prostitutas, incluida Ruby, para las fiestas que un fiscal de Milán describió como "orgías báquicas" celebradas en la residencia del exprimer ministro. Berlusconi y sus seguidores cuentan que se trataban de cenas normales y sostienen que las acusaciones son inventadas por elementos izquierdistas del poder judicial que lo persiguen por razones políticas, al igual que en otros juicios, previos y actuales.

El presentador de TV, Emilio Fede, uno de los supuestos proxenetas, manifestó que estaba "literalmente alterado" por el veredicto dictado este lunes: "Vivo este momento con una profunda tristeza, porque lo lamento, porque soy su amigo y porque estoy seguro de que no puede haber hecho esto de lo que se lo acusa".

La hija de Berlusconi, Marina, expresó que la "condena de su padre ya se había decidido desde un principio".

Luca d'Alessandro, miembro de la comisión de justicia de la Cámara y del PdL de Berlusconi, indicó que la sentencia era "una violación de la ley en nombre del combate político" luego del fallo, el segundo en una semana dictado contra el exprimer ministro.

La semana pasada una petición de Berlusconi fue denegada por la Corte Constitucional para anular una sentencia a cuatro años de prisión por fraude fiscal en su imperio mediático y una inhabilitación de cinco años para ejercer cargos públicos.

Funcionarios veteranos del PdL han expresado que los legisladores del partido renunciarán si la Suprema Corte de Casación ratifica la condena y la sentencia queda firme.

El zar de los medios asimismo está apelando una sentencia a un año de prisión por la publicación de una escucha telefónica obtenida ilegalmente y se enfrenta a la acusación formal por la supuesta compra de senadores para hundir a un gobierno de centro-izquierda.