(ANSA) - MADRID, 04 MAG - La final del WTA 1000 de Madrid
repitió a las protagonistas de la pasada edición, aunque esta
vez consagró campeona a la polaca Iga Swiatek, quien se sacó así
la espina por la derrota sufrida hace un año ante la bielorrusa
Aryna Sabalenka.
Hoy, la gloria fue para la número uno del mundo, quien se impuso
por 7-5, 4-6 y 7-6 (9/7) tras una verdadera batalla ante su
escolta en el ranking que se extendió por tres horas y 11
minutos en la Caja Mágica y en la que la bielorrusa desperdició
tres "match-point" a su favor.
Swiatek resistió y finalmente logró sacarse la espina ante la
rival que hace un año la derrotó en tres sets para celebrar su
segunda corona en Madrid tras la que había obtenido en 2021.
Hoy no pudo ser para Sabalenka, que había librado otra dura
batalla con la kazaja de origen ruso Elena Rybakina (4) en
semifinales y se despidió de Madrid con la frente en alto pese a
la derrota con la polaca, que celebró así su primer título en
este torneo en la final más extensa de la temporada entre las
damas.
Vigésima corona para Swiatek y tercer título de la temporada
para la jugadora de 22 años, tres veces campeona en Roland
Garros, que a partir de la próxima semana intentará reconquistar
su corona en el WTA 1000 de Roma, donde reinó en 2021 y 2022.
Madrid consagró hoy a su nueva reina y mañana coronará a su
nuevo rey luego de dos años de reinado del español Carlos
Alcaraz, tercero del ranking que fue eliminado en cuartos de
final y estará ausente en el Masters 1000 de Roma, al igual que
el italiano Jannik Sinner, número dos del mundo, también por
lesión.
Alcaraz fue eliminado en la "Caja Mágica" por el ruso Andrey
Rublev, octavo del ranking y uno de los finalistas en el torneo
que chocará por el título con el canadiense Felix
Auger-Aliassime (35), quien se vio favorecido por el abandono de
Sinner en cuartos y también por el del checo Jiri Lehecka cuando
promediaba el primer set del partido que disputaban en las
semifinales.
Para Auger-Aliassime se trata de la primera final de un Masters
1000, mientras que para Rublev será la quinta en un torneo de
esa categoría en el que sólo pudo alzar un título el año pasado
en Montecarlo.
El historial marca una clara ventaja en favor del ruso, que se
impuso en cuatro de los cinco enfrentamientos previos, incluido
el que animaron este año en Rotterdam, torneo en el que en 2022
el canadiense logró su única victoria frente a Rublev, quien lo
superó en Umag en 2018, en Adelaida en 2020 y en el ATP 250 de
Marsella en 2022, en la única final que animaron hasta el
momento. (ANSA).