Por Marcos Romero
(ANSA) - CIUDAD DE MEXICO, 26 APR - La corrupción en México
no es un fenómeno privativo de los ámbitos políticos o
gubernamentales y afecta ya a por lo menos la mitad de las
empresas en este país, de acuerdo con un estudio elaborado por
un importante organismo cúpula del sector privado.
El análisis realizado por la Confederación Patronal de la
República Mexicana (Coparmex) expone que entre 2018 y 2023 la
cifra de empresas que reportó irregularidades que involucraron
el pago de una coima solicitada por un servidor público o una
tercera persona pasó de 39% en 2018 a 48% en 2023.
José Medina Mora, presidente de la entidad, señaló que
estos actos tienen lugar en las compañías privadas sobre todo
cuando se busca "la agilización de trámites", la gestión de
permisos y cuando se trata de evitar sanciones por algún
incumplimiento de una norma.
Los estados donde se registran más acciones de esta
naturaleza son Baja California y Sinaloa (norte), Puebla y
Tlaxcala (centro) y Quintana Roo (sureste. La buena
noticia, según la Coparmex, es que 8 de cada 10 empresas "tienen
instrumentos para disminuir la corrupción, que van desde códigos
de ética y políticas anticorrupción".
Sin embargo, aceptó que "nos queda un 20% de firmas en las
cuales tenemos que lograr que se implementen estos controles
internos".
Medina Mora, durante la presentación de su informe,
elaborado en colaboración con la organización civil Mexicanos
contra la Corrupción y la Impunidad, señaló que la corrupción en
las empresas es algo que "se denuncia poco" a pesar del
crecimiento en la incidencia.
La justificación de los empresarios para no hacerlo es que
"los empresarios lo consideran un acto que no sirve para nada y,
de manera preocupante, el temor a represalias", señaló.
Y es que en cuanto a las compañías que denunciaron,
únicamente el 4% de los casos el asunto se investigó y culminó
con la sanción al responsable.
El fenómeno también desalienta la inversión debido a que
hay empresas extranjeras que ven "la oportunidad" de invertir en
México en diversos modos, entre ellos asociándose con firmas
mexicanas, pero "no lo hacen porque dudan del Estado de
Derecho".
Según la Coparmex, México tocó "el índice más alto de
corrupción y extorsión" en la actual gestión del presidente
Andrés Manuel López Obrador, iniciada en diciembre de 2018 y la
cual termina el próximo 1 de octubre.
El organismo indicó que el año pasado 48% de las empresas
reportaron haber sido "obligadas a realizar un pago, regalos o
beneficios a un servidor público a cambio de realizar un
trámite", lo que significa que el problema avanzó 9 puntos
porcentuales en tan solo un año.
Al iniciar la administración actual, el índice de
corrupción en el sector privado "marcaba una tendencia a la
baja" en los primeros años, pero en 2022 y 2023 se elevó la
tendencia.
El valor nacional de empresas que experimentaron este
problema es de 48% en promedio en todo el país, pero va desde el
más alto, en Baja California, colindante con Estados Unidos, con
67% hasta el más bajo en Durango (19%), ambos en la zona norte
del país. (ANSA).